Dieciséis.

Querido Eme:
Hoy es el mejor día en el que esta entrada tiene que comenzar con ese título , sin duda que hoy es el día correcto. En verdad este blog siempre tuvo que ser por y para ti ya que el título de éste es tu nombre y su fin siempre fue para ti. Hoy no escribo para nada diferente a recordar que te quise.
Empezaré diciéndote que hoy es el último dieciséis del año y que este ha sido el primer año en el que has formado parte de mi vida. No voy a decirte que te quiero ni nada de eso , porque en verdad todo eso cambió hace ya muchos meses , pero lo que voy a decirte es que gracias a que en el mundo hay personas como tú he podido ser feliz.
Has sido mis 541 kilómetros más deseados , las ganas de seguir , las 34 noches llorando echándote de menos , mi Cuenca - Barcelona favorito , mi M especial y eso no cambiará ni aunque pasen mil años.
Voy a recordarte como empezó todo esto. Como un 16 de agosto de 2011 cambiaste mi vida y como de ahí hasta ahora lo he llevado:
16 de agosto de 2011 , un verano increíble y ¿sabes? No podías estar en otro lugar que no fuese Lanzarote y no sabes lo que me gustaba encontrarme con tu mirada y recorrerte en un instante , tus sonrisas infinitas , tus palabras , todo tú.
Jamás voy a arrepentirme de que hayas estado en mi vida , tenlo claro.
Del 16 en adelante , los días iban pasando y me sentía estúpida por no hablarte porque habías movilizado algo dentro mío , porque me acostaba cada noche queriendo verte y queriendo oírte hablar.
22 de agosto de 2011 , esa noche fue la noche que jamás olvidaré. Sólo tú y yo sabemos que esa noche todo nos sobraba. Empezó siendo la conversación más absurda pero las horas siguientes fueron algo para detener el tiempo. Tumbados en una mesa de billar , palabras sin sentidos , sonrisas , anécdotas idiotas , miraditas por aquí , miraditas por allá. ¿Y sabes qué? Ese 22 por la mañana me levanté con más ganas que nunca. Desayunamos y empezamos nuestras últimas horas juntos. No sabes como deseaba que el tiempo no se gastase porque siempre he odiado las despedidas y si se trataba de despedirme de ti , creeme que muchísimo más. Volvimos a las andadas , a las mesas de billar , a esas tonterías que nadie entendía , los miles de momentos en la piscina pero como todo empieza todo acaba. En el momento en el que te fuiste en ese momento en el que pensé que no te volvería a ver hasta dentro de muchísimo tiempo no sabes todas las ideas que se cruzaron en mi cabeza. Inventé veinte formas de despedirme pero en todas ellas llegaba al mismo punto que era el mismo que me dolía , inventé todas las formas posibles de que no me doliese decirte adiós pero no encontré la forma y me doliste más que nadie.
Esperé ansiosa que te conectases a Facebook para poder hablar contigo y saber qué tal había ido la vuelta a  Barcelona. Cuando me dijiste que sentías no haberte despedido bien de mí , fue imposible contener las ganas de llorar porque todo ese día me resultó imposible de hablar sin evitar llorar. Toda la tarde hablaban de Barcelona en la televisión y cada vez que lo oía lloraba hasta quedarme sin lágrimas , lloraba porque sabía lo que me esperaba sin ti.
Al día siguiente la que volvía era yo y no podrías calcular matemáticamente las ganas que tenía de coger un puto avión a Barcelona e irme contigo donde fuese y como fuese.
Los días iban pasando y quería hablar contigo (era lo único que quería).
Y volviendo la vista hasta hace unos meses no sabes lo muchísimo que me has apoyado , las millones de risas que has conseguido sacarme aunque no estuvieses aquí. Por todas esas veces que escuchabas mis ralladas , cuando me llamabas rubita , todos los días que nos hemos echado de menos... Eres alguien increíble estés donde estés , Marc. En siete días te cogí más cariño que he cogido a nadie y siempre recordaré nuestro 16 de agosto , por eso mismo te escribo hoy. El último 16 del año y me encantaría pasar el resto de 16 contigo.
¿Te acuerdas cuando me dijiste el 16 de agosto de este año?: Ya sabes , yo también te estaré esperando en Barcelona o donde sea , no me voy a currar un parrafón porque después del tuyo es imposible hacer uno que por lo mínimo se le parezca. Gracias por quererme y por todo , siempre me haces sonreír rubita.
Estés a 541 kilómetros como si estás a 1000 , te voy a echar de menos porque eres uno de las mejores personas que se me podía cruzar en la vida.
Y ya , para acabar decirte que aunque lo nuestro hubiese sido una película que al final el estreno se haya cancelado , ahora mismo tengo la mejor historia que se podría contar.
Ojalá algún día volvamos a juntarnos para recordar el increíble verano que vivimos juntos y que dentro de muchos años sigamos recordando lo mucho que nos importamos en su día.
Te quise , te quiero y te querre , Marc.

Hoy más que nunca , la nuestra.